Regresa el presidente Felipe Calderón de su visita a los Estados Unidos y encuentra la casa revuelta: Se declaró legal la huelga minera en Cananea; La Suprema Corte declaró que procede la auditoría sobre las autorizaciones a casa de juego de apuestas de la secretaría de Gobernación y se profundiza el golpeteo contra Mouriño.
Hay más: Superan los seis mil amparos de empresarios contra el Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) que deberá pagarse a más tardar el próximo lunes y el narcotráfico ejecutó a seis personas en tres días en Tijuana, parafraseando la campaña militar de “nosotros si vamos”, a escasa horas del espaldarazo de la Casa Blanca.
Elementos que al sopesarse con los supuestos a reales logros de la visita presidencial por el distante vecino del norte, como sería el acuerdo ecológico con el xenofóbico exterminator Arnold Schwarzenegger, o los contactos a mínimo nivel con operadores de los precandidatos presidenciales, marcan una gran diferencia.
La razón es que se antoja difícil se cumpla el compromiso del mandatario mexicano en el sentido de abatir el origen de la migración mediante la inversión productiva generadora de empleos para arraigar a los mexicanos en sus lugares de origen y contribuyan al engrandecimiento de la riqueza mexicana sin arriesgar la vida.
Así, con base en este clima económico, político y social, se observa que a un año y dos meses de gestión, es decir, uno de planeación y dos meses en que debiera iniciarse la ejecución de los programas de gobierno, la administración Calderón no acaba de asumir el poder logrado con medio punto de diferencia, según las cifras oficiales.
Es cierto que la gobernadora perredista de Zacatecas, Amalia García, hija del destacado priísta Espartarco García, le reconoció en esta gira como “presidente” mientras que una facción de su partido le desconoce y busca debilitar al golpear al recién estrenado Secretario de Gobernación, Camilio Mouriño Terrazos.
De momento, el controvertido Gerardo Fernández Noroña parece haber sembrado la duda razonable sobre la nacionalidad del secretario de Gobernación, en un duelo de documentos que obtuvo contra los mostrados por la Secretaría de Relaciones Exteriores sobre el lugar de nacimiento de la mamá del funcionario. Y hay división.
Enfrenta el jefe del ejecutivo, además, el fuego amigo. Trascendió, se dice que de fuentes de extrema derecha venezolana, una minuta de diciembre pasado del embajador en México, Roy Chaderton Matos a su canciller, de su apreciación que tiene de empresarios mexicanos ligados a la Organización Demócrata Cristiana de América.
El presidente del organismo derechista para el periodo 2006 – 2007 es Manuel de Jesús Espino Barrientos, de Victoria, Durango, y estaría financiado por Lorenzo Servitje, del Grupo Bimbo y con inversiones cercanas a los 160 millones de dólares en Venezuela.
Los indicios llevan a la especulación y en derecho, las pruebas son las únicas que pueden sustentar un juicio. Sin embargo, afectó la imagen del residente de Los Pinos, no por su disposición al acercamiento con Venezuela, sino que se desnuda una aparente inclinación a favorecer la impunidad del foxismo.
El empresario de pan de caja se muestra activo en la política en la larga y costosa precampaña de Vicente Fox y posteriormente, es señalado por el perredista Andrés Manuel López Obrador de subirse al carro calderonista, y trasciende una carta de su puño y letra para defender al Bebeto jalisciense en la Secretaría de Agricultura.
Por si fuese poco, El Sol de México, periódico insignia de OEM, tituló su nota principal del 14 de febrero: Revés de la Corte a Calderón. La Suprema Corte declaró infundado el recursos del presidente Felipe Calderón para impedir se auditarán los permisos de juegos por la Secretaría de Gobernación y gastos publicitarios del señor Vicente Fox.
Los intereses económicos foxistas en el Grupo México fueron golpeados también ese 14 de febrero por el juez 6 de Distrito en Materia Laboral, Ariel Torres Quevedo, al declarar legalmente existente la huelga en la minera Cananea, en Sonora.
El único éxito del actual presidente panista, parece que se lo dará el próximo jueves el priísta Emilio Gamboa Patrón, quien anunció la aprobación de la inquisitorial Reforma Judicial que conculcará las garantías individuales y derechos humanos de los mexicanos. Lo de más es lo de menos, diría el filósofo de Güemes.
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